Por: Viviana Moncaleano – Coordinadora del Convite de las alternativas 2023.
Todos los días nos enfrentamos de manera cada vez más evidente al crecimiento acelerado de la degradación ambiental, reflejado en la crisis climática y la pérdida de biodiversidad, lo que motiva reflexiones sobre nuestras formas de producción, consumo y de habitar el mundo. Sin embargo, en medio de esta inquietud, emergen alternativas de esperanza arraigadas en la defensa de la vida, el cuidado de los territorios y sus saberes. Estas iniciativas locales no solo nos muestran nuevas formas de abordar los desafíos ambientales, sino que también nos invitan a abrirnos a la posibilidad de una transformación a formas de vida sustentables. Nos animan a ser más sensatos con el planeta, a re-usar y repensar nuestras acciones, para estar en armonía con el entorno que habitamos.
En tal sentido, desde el 2021 en la plazoleta la Florida del barrio Panamericano de Bogotá, emerge y se consolida como parte de una tradición decembrina, el “Convite de las alternativas, por el cuidado de la vida”, una propuesta de Censat Agua Viva para compartir con campesinos, indígenas y afrodescendientes representantes de más de 70 organizaciones comunitarias de al menos 15 departamentos del país, quienes movilizan a la capital sus propuestas de defensa territorial con las que resisten a proyectos extractivos, y que son la base para pervivir en los territorios bajo lógicas de bienestar que reconocen la interdependencia con la naturaleza y el poder de lo colectivo.
Para esto, durante varios meses previos se genera todo un proceso creativo y de articulación, retroalimentado por los aprendizajes de cada versión, los aportes de las organizaciones y el interés de actores externos que cada año se van vinculando para demostrar que la transición camina desde hace mucho en las bases sociales del sur.
El Convite es una fiesta en la que se incluyen acciones políticas que son parte del trabajo de acompañamiento que hace Censat Agua Viva. Por ejemplo, la iluminación del evento no solo se realiza con energía fotovoltaica, sino que su instalación , las actividades de la agenda, la definición de los productos para la venta, las tecnologías propias que se implementan al interior, la alimentación interna de los participantes, las piezas de difusión y la temática grande que potencia conceptualmente cada año el Convite; se basan en experiencias de autonomía energética, alimentaria, etílica y de gobierno propio; que se encuentran y dialogan posibilitando un intercambio de saberes y de fuerzas alrededor de una fiesta enmarcada por diversidad.
El diseño de la imagen del Convite, ha pasado por las manos de diferentes artistas latinoamericanos, quienes en sus ilustraciones plasmaron elementos fundamentales de la comunalidad y el buen vivir. La imagen del 2021 traía como idea central, el compartir con la ruralidad que sostiene la vida, que la cuida desde los territorios por medio de la producción de alimentos y el tejido social; en el 2022 se reforzó la idea de que los seres humanos “somos energía”, y tenemos el poder de movilizar la transición, la hacemos posible rompiendo los esquemas que nos modelan de forma homogénea, por esto nos transportó en una bici-máquina voladora; finalmente en 2023, se invita a cuestionar las prácticas del consumo y a rescatar acciones de reparación, intercambio y cacharreo, propuestas que son relegadas por el capitalismo que se alimenta de la acumulación de material y que así mismo es la base de la crisis civilizatoria, más conocida como crisis climática.
Como se evidencia en lo anterior, el arte ha sido fundamental para pensar cada Convite. Por esta razón, los grupos musicales invitados representan la diversidad cultural del país. En la plazoleta La Florida, se ha bailado y cantado una variedad de géneros musicales, desde rock y punk hasta bullerengue, cumbia rasca, rap, vallenato, carranga, folckor andino, caribeño y del pacífico; música interpretada por grupos y artistas que apoyan o hacen parte del activismo ambiental y las luchas territoriales. En el escenario, han compartido artistas como las 1280 almas, Edson Velandia, el Grupo Bandola, el Súper Son Frailejónico, Tumbacatre, Hugues Martínez, Los Pirañas, Monte Violeta, los Corraleros de Majagual, Chambimbe, entre muchos otros.
Esperamos continuar fortaleciendo esta apuesta cargada de energía humana, de flujos de vida que demandan y promueven la justicia ambiental. Les invitamos a entender el mundo desde otros lugares, con otras miradas, a escuchar voces que no reducen el campo de acción a lo corporativo, y que al contrario, expanden el espacio de posibilidades para transformar y poner la vida en el centro.
