
En los últimos años, el hidrógeno bajo en emisiones ha sido posicionado a escala nacional y global como una alternativa energética capaz de contribuir a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en sectores altamente demandantes de energía, donde la electrificación resulta insuficiente, como la industria siderúrgica y el transporte de carga pesada, entre otros. Sin embargo, el foco en la reducción de emisiones invisibiliza los conflictos socioambientales asociados al desarrollo de megaproyectos energéticos y el riesgo de reproducir las relaciones de colonialidad y subordinación económica entre los países exportadores y los países demandantes de materias primas.
En este documento, escrito por María Paz Aedo, Censat Agua Viva ofrece una mirada crítica a la producción a gran escala de hidrógeno bajo en emisiones en Colombia, a partir de la revisión de los documentos oficiales y en el marco de lo que considera una transición justa. Los documentos analizados incluyen la Hoja de Ruta y el proyecto de ley – que se archivó el 12 de junio de 2024 en Senado -, considerando tanto los impactos sociales y ambientales que conlleva esta forma de producción, como las controversias y tensiones asociadas a su destino y potenciales usos. Entre estos cuestionamientos, se destaca el alto uso de agua, tierras e insumos que requiere la producción de hidrógeno; las limitaciones de acceso y desarrollo de tecnologías apropiadas, eficientes y seguras para su almacenamiento, transporte y distribución; la reproducción de prácticas extractivistas para abastecer industrias también extractivas, como la minería, el acero y la agroindustria; la concentración de los beneficios y la externalización de costos, entre otros elementos.