Ficha: 23
Expositor: Mujeres Emprendedoras de Pueblo Nuevo – Natagaima
País: Colombia
Lugar: Natagaima, Tolima, pueblo nuevo

 Nuestra experiencia de energía comunitaria:

Estamos localizadas en Pueblo Nuevo, un territorio separado del desierto de la Tatacoa por el Río Magdalena y el territorio se está secando, por efecto del mal manejo del territorio y por el cambio climático. Contamos con sol la mayor parte del año, sin embargo, no tenemos acceso al agua y a la energía de manera constante. Gradualmente hemos ido buscando soluciones, a la vez que usamos el conocimiento tradicional para aprovechar integralmente el sol.  Nuestra experiencia comunitaria se ha basado en el uso de la energía solar para cultivar productos que exigen alta luminosidad como el estropajo, los frutales como el melón, la sandía, el mango, el tomate, el maíz, los fríjoles, flor de Jamaica; a partir de semillas ancestrales que consumen poca agua. Así mismo tenemos experiencia para secar y transformar productos orientados al mercado local y a pequeñas cantidades que se sacan a mercados solidarios en Bogotá. Tenemos pequeños rebaños de ovejos y cría de gallinas criollas, adaptadas también al clima.  El clima soleado favorece la salud de plantas, animales y humanos.
Nuestras estrategias productivas buscan contrarrestar los efectos del cambio climático y están basadas en la conservación, propagación e intercambio de semillas nativas y razas criollas, en la producción de alimentos usando leguminosas y abonos orgánicos, el aprovechamiento de las cosechas de agua, transformación de productos agropecuarios cultivados en los patios y fincas, promoción y uso de fondos de ahorro comunitario.   Hemos podido contar con alimentos sanos y suficientes y tener una producción diversificada que nos permite tener una economía más estable a lo largo del año.  Esto nos da garantía por el momento, para no desplazarnos.

Los componentes técnicos

Equipos: Molino Manual, nevera de 9 pies, motobomba Diesel de 3″, motobomba eléctrica a presión de 0,5″
Hornos tradicionales: construcción de barrio de capacidad para hornear lechona, 200 bizcochos. Insulsos y demás amasijos.
Fogón ahorrador: Es un fogón que usa leña y tiene un quemador que reduce hasta el 80-85% de consumo de leña. Recolectamos leña que se seca de manera natural. No hacemos tala.
Semillas y conocimientos tradicionales asociados al uso de la biodiversidad local:  Maíces y fríjoles con tolerancia a la sequía, plantas medicinales y preparaciones, hortalizas y frutas de calidad, razas de gallinas criollas y conocimientos tradicionales para su reproducción y manejo.
Aljibes: Uso de agua subterránea con capacidad aproximada de 8 metros cúbicos. En verano merma significativamente.
Crédito: Se tiene acceso al Fondo Comunitario del sur del Tolima, se tiene un grupo de ahorro local llamado «Mujeres Emprendedoras»
Energía: Tenemos conexión al sistema eléctrico, pero usamos la leña y también la fuerza mecánica para sembrar, regar, cosechar.
Organización: Escuela Manuel Quintín Lame, Escuela de cultura y paz, mesa de mujeres de Natagaima y Escuela Cacica Dulima

Logros para resaltar

  1. Ser guardianas de semillas nativas. Las semillas nuestras ya están adaptadas a las condiciones de sequía o de falta de agua. Es una evolución muy importante que nos beneficia y las cuidamos por eso. Son semillas sanas y no contaminadas por transgénicos o por venenos.
    2. Permanecer de manera digna en el territorio: Hemos podido hacer resistencia a los efectos del avance del desierto de la Tatacoa, pero también a la agricultura del veneno y del daño ambiental. Cuando gestionamos los aljibes, se beneficiaron los niños de la Escuela y también los adultos mayores y cuando hacemos abonos solucionamos parte del problema de los residuos.
    3. Hacer visible la participación y el aporte de las mujeres cabezas de familia. Muchas tareas son asumidas por las mujeres y eso se ve en el territorio y sobre todo en las épocas más críticas cuando escasea el alimento.

La participación de las mujeres

En la vereda Pueblo Nuevo del municipio de Natagaima nos unimos las mujeres cabezas de familia y las mujeres con compañero, la mayoría víctimas del conflicto para adelantar proyectos que beneficien nuestras familias y de paso contribuyan al detenimiento del avance del desierto. Mujeres que tenemos capacidades, amamos el campo y estamos en constante capacitación para mejorar nuestros procesos y calidad de vida.
Uno de los pasos decisivos que tuvimos fue hacer que la organización de mujeres ASFUMUJER, se volviera una organización de las mujeres y sus familias, para que los compañeros llegaran y colaboraran.
El liderazgo de las mujeres se evidencia en que ha habido varias gobernadores y vicegobernadoras indígenas. También en los procesos de víctimas, en Asfumujer y en la Escuela Manuel Quintín Lame, ha sido clave la participación y decisión de las mujeres.